Lanzado un 14 de mayo de 2010 en Europa y un 18 de mayo de 2010 en América, el juego sufrió de muchos problemas durante su estreno, teniendo que debutar al mismo tiempo que varios juegos como Red Dead Redemption, Lost Planet 2, Skate 3, Blur, UFC 2010, Prince of Persia: The Forgotten Sands y muchos más. Pese a haber sido reconocido por la crítica y los fans, el juego no pudo ser un éxito comercial hasta dentro de muchos años, aunque también un juego cuyo fracaso fue en parte por cuestiones de pirateria para su era.
LOS INICIOS
Después de que Remedy estuviera bajo presión y con prácticas de crunch para lanzar Max Payne 2 en el año 2003, los desarrolladores buscaron descansar y pensar en nuevas ideas para su próximo proyecto. Sin muchas vueltas se les ocurrió realizar un juego con un fuerte componente narrativo mezclando las influencias de Stephen King y la serie de TV Twin Picks de David Lynch para crear un videojuego con un formato por episodios. Pero para distanciarse de la linealidad de Max Payne se buscaba un juego de mundo abierto al estilo sandbox con elementos de supervivencia, acción cinemática y un ciclo de día y noche que juegue un rol importante en la jugabilidad. De día podríamos enfocarnos en la investigación o la búsqueda de recursos para sobrevivir todas las noches a las pesadillas que se nos acercaban.
 |
| Imágenes de las primeras betas de Alan Wake y diseño original del personaje |
Parte de esos conceptos se llegaron a ver en la E3 2005 cuando anunciaron por primera vez Alan Wake para la consolas de nueva generación, es decir Xbox 360, PS3, además de PC. Pero de acuerdo con el director creativo Sam Lake, muchas de las mecánicas y la narrativa no podían complementarse correctamente, lo que llevo a tener que reiniciar el proyecto en el futuro. En 2006 Remedy logro asociarse con Microsoft y el juego pasaría a ser una exclusiva de Xbox 360 y Windows Vista. La intervención de Microsoft con el desarrollo del juego fue también uno de los puntos que dificultó la combinacion de los conceptos de narrativa con un mundo abierto, y el propio Sam Lake dijo que tuvieron demasiados procesos indefinidos para lograr concretar la fórmula. Para evitar caer en un ciclo sin fin de problemas ante la falta de una visión dentro del propio estudio o no cumplir su contrato con Microsoft, todo el equipo se tomo un descanso de dos meses hasta replantear las ideas y allí es donde optaron por enfocarse mejor en una experiencia lineal pero con una historia dividida por episodios. Lo cierto es que algunos segmentos del juego se podra hacer uso de vehículos como en el concepto original y usar herramientas como linternas o generadores para luchar contra la Presencia Oscura han llegado hasta el juego final.
Según Phil Spencer,
en esos tiempos la visión de Remedy era originalmente de lanzar el juego en un
formato episódico mediante Xbox Live como sucedió años más tarde con títulos
como The Walking Dead de Telltale o Life is Strange de Dontnod, pero Microsoft
le sugirió que Alan Wake debería lanzarse como un juego completo en formato
físico. La razón por la cual se descarto la idea, según Spencer, fue que no
estaban seguros de que este formato seria exitoso a nivel comercial y que las
ventas del juego irian cayendo con cada episodio posterior. Pero el espíritu de
una serie de televisión se quedo altamente atada a la experiencia, al dividir
al juego en episodio donde poco a poco la trama avanza hacia su climax, al agregar
elementos como el famoso cliffhanger al final de cada capítulo, la clásica
escena Anteriormente en… que da un repaso a lo que sucedió recientemente o con
una banda sonora durante los créditos que simula las series de televisión. ¿Se imaginan el producto final se hubiera lanzado en otro formato?
¿ES TARDE PARA JUGARLO?
Aunque haya pasado una década, Alan Wake sigue siendo uno de esos juegos que muchos llegamos a amar con cariño. Fue una de las pocas exclusivas de Xbox 360 que se alejaron de ser un juego apuntado a un público muy concreto y trato de encontrar a esos fans que buscaban algo más narrativo y con muchos detalles a los que debíamos prestar atención. Fue una de esas experiencias que busca ser más que un videojuego y trata de meternos en su mundo, que nos quedemos sorprendidos ante lo que la visión de un estudio nos intento transmitir. Remedy no solamente tiene el toque para contarnos historias que puedan introducir elementos cinemáticos, psicológicos y darse el lujo de jugar con la narrativa, también son unos buenos maestros a la hora de la acción creando momentos de acción que se nos han vuelto memorables.
Alan Wake, pese a todos sus años seguirá dentro de esa repisa de los juegos de culto. Quizás hubiera sido una obra más apreciada en sus tiempos si las condiciones de su lanzamiento hubieran sido diferentes, pero lo importante es que no ha sido un titulo que ha quedado en el olvido. Como muchas obras por más buenas que sean, el tiempo pasa a olvidarse de ellas y terminan no siendo recordadas hasta que algo las pone de vuelta en la luz, indiscutiblemente el juego genero una base de fans demasiado fuerte como para que eso llegue a pasar.
Creo que la visión más emocionante se logró con The
Signal y The Writer, los dos episodios por contenido descargable que se lanzaron unos meses después de su lanzamiento. Ambos episodios dieron el cierre digno al juego mostrando
un mundo distorsionado lejos de nuestra realidad y que el jugador debía
atravesar como si fuera una pesadilla en su cabeza. Esto fue el elemento que le faltaba al juego original y pudo ser muy ambicioso si llegaba a ser incluido ya que jugaban más los elementos y la ambientación para que parezca un suceso que no se puede explicar o no tiene esa logica. Es una lastima que hoy en día ya no sean gratuitos como hace unos años, pero es una gran pena que Remedy no se haya tomado el esfuerzo aún de lanzar los DLCs en el mercado argentino.
Quienes tengan la oportunidad de jugar el juego original y sus DLCs, nunca es tarde para sumergirse en una buena historia llena de misterios y pequeños detalles que lo hacen atractivos y muy especial, desde los guiños a películas como El Resplandor, la inclusión de un show de televisión llamado Night Springs que hace referencia a La Dimensión Desconocida. Si bien los que busquen acción no van a quedar decepcionados, recordemos que Alan Wake esta lejos de ser un shooter intenso y se toma su tiempo para dividir las secuencias de exploración, puzzles o momentos aleatorios que nos hacen olvidar por unos segundos que nuestra vida corre peligro. Alan Wake fue esa exclusiva diferente que tardamos mucho en apreciar porque no estábamos acostumbrados a ese estilo en particular.
A pesar de no haber sido el éxito que esperaban, Remedy tenía intenciones de desarrollar una secuela y presento el proyecto tres veces a Microsoft a lo largo de los años, pero fue rechazado por la empresa en cada oportunidad porque no lograba convencerlos porque buscaban algo nuevo. Algunas de esas ideas terminaron en Alan Wake: American Nightmare, un spin off que no era exactamente una secuela, y otras sirvieron como inspiración para la creación de Quantum Break, otro de los proyectos en que ambas partes se asociaron. Este último mantenía varias similitudes en cuanto a su formato episódico o los muchos guiños a la saga Alan Wake. Si bien Microsoft nunca tuvo un interés en una secuela, Remedy termino comprando los derechos en julio 2019. Muchos esperamos algún ver ese océano que una vez el escritor dijo y saber como la historia sigue. ¿Pero llegará ese día?
Alan Wake actualmente se puede disfrutar en Xbox One y Windows 10 PC via Xbox Game Pass, además Xbox 360 y Steam. Esperemos que más gente tenga la oportunidad de verlo.