Impresiones: Beta Cerrada - The Crew Motorfest

Por Gabriel Llarena Ruiz

The Crew Motorfest tuvo una beta cerrada durante el pasado fin de semana. En una era donde Forza Horizon marco el camino para los juegos arcade y sus rivales tienen que poner un esfuerzo adicional para llamar la atención. Ya hemos hablado en varias ocasiones como Need for Speed, Test Drive, The Crew misma y cualquier otra saga que cree un nuevo mundo abierto tenga que buscar la forma de reinventarse. The Crew siempre fue una saga que con ideas muy sólidas, grandes ambiciones pero con resultados mixtos en algunas funciones. Motorfest por el momento sigue esa misma línea mostrando que Ubisoft sigue refinando una de las especialidades aunque todavía falta camino.

Desde su antecesor, The Crew 2, Ubisoft abandono de una trama al estilo road-trip y otros elementos que eran más típicos de juegos como Need for Speed para aprovechar la influencia de Forza Horizon y los enormes festivales. El resultado fue un juego de carreras repleto de eventos pero que aprovecho una diversidad de vehículos que iban desde coches y motos hasta lanchas y avionetas. En lo personal esa idea no me desagrado para nada y veía que el juego podía tener el potencial de ser explotado de una nueva manera, pero el juego presento nuevos problemas que necesitaban de un ajuste más serio.

Motorfest puede que venga o no a tratar de solventar los problemas que siguen siendo persistentes con la saga. Por ejemplo: las físicas de conducción nunca fueron el fuerte de sus predecesores. Por momentos sientes que la maniobrabilidad del coche es muy buena, luego por otros instantes los coches parecen demasiado duros o que al chocar que todo ya es demasiado arcade. En esta ocasión al menos se puede sentir que los coches son más fáciles de controlar y responden mucho mejor que antes.

La IA tuvo mejoras significativas. Ivory Tower decidió reemplazar el sistema introducido en The Crew 2 basado en el rendimiento del coche por modos de dificultad más estándar. Son un total de cinco niveles de dificultad (con una opción de ajustar todo de forma personalizada) que irán determinando el comportamiento de los rivales y otros parámetros para hacer de la experiencia más desafiante a gusto del jugador. Para que entienden un poco más, The Crew 2 cuenta con un sistema de dificultad más enfocado en el rendimiento de tu coche y ciertos requisitos que en la dificultad misma. Suena bien por fuera, pero en ejecución la experiencia creo muchos momentos llenos de desbalance en donde uno si quería, ganaba las carreras con poco esfuerzo.

Por supuesto que las estrellas de todo este juego son los vehículos. El juego estará organizando en diferentes listas de juegos que se irán desbloqueando mientras terminemos llegando en los podios o cumpliendo los retos. Cada lista se enfocaría al menos en una clase de coche, un fabricante, una temática, etcétera, lo que permitirá que los jugadores puedan probar un vehículo diferente por prueba para darle más dinamismo al modo carrera y no quedarse atado a un solo vehículo. En este sentido han hecho un mejor trabajo en presentarnos todas las posibilidades y algunos referentes de los fabricantes para que el jugador tenga una experiencia diferente con cada evento.

Los escenarios suelen tener decoraciones o algunos detalles basadas en la lista de juego. Dos ejemplos sencillos: Cuando estamos con los Porsche el mapa tendrá carteles gigantescos de 911, mientras que al jugar con los coches japoneses notaremos que todas las carreras son nocturnas y veremos de forma constante un gran dragón sobre la pista.

Adicionalmente podremos notar que algunas pistas cuentan con un desafío adicional que recompensa a aquellos que no choquen o se salga de la pista. En estas carreras pudimos ver una recompensa de créditos adicionales que se irá disminuyendo si tenemos si por ejemplo terminamos chocando contra algunas estructuras que están en la pista.


Motorfest también ha aprovechado a tomar inspiración por juegos como Riders Republic para sus eventos multijugador que funcionan de forma similar a las carreras masivas. Hasta 28 jugadores podrán jugar en un evento multiclase que nos llevará a recorrer los diferentes biomas de Oahu, con la diferencia de que solo tendremos una carrera y no un total de tres. Los vehículos de alquiler darán algo básico con lo que jugar, pero se nota que aquellos que tengan mejores coches en su garaje van a tener lo necesario para ganar con más facilidad.

También se ha visto un evento de Derby Demolition en equipos en combinación con el Battle Royale. Los jugadores empezaron controlando un avión y luego deben descender hasta la arena de combate para destrozar a otros rivales, conseguir un mejor botín (es decir, vehículos más grandes y resistentes) y continuar hasta que lleguemos a ser el último en pie.

Por otro lado, existen espacios sociales (otra función que hemos visto en Riders Republic) aunque no se logra aplicar bien. Cada vez que volvíamos a entrar a la beta, los jugadores íbamos directo a uno de estos pero lejos de aquella vida y locura que vimos en el juego deportivo de Ubisoft. Tampoco es un espacio personal como Test Drive Unlimited, así que ahora se siente que un elemento que sobra bastante.


Con respecto a las visuales no hay demasiado que podamos destacar ahora. Si bien el juego logra verse bien sin ser un portento grafico aunque su rendimiento está acompañado por problemas por caídas de framerate. En Series X sabemos que al menos se logra una mayor estabilidad en uno de sus dos modos gráficos, pero nosotros jugamos mayormente en Series S. Cuando la beta quería funcionar de forma fluida, lo hacía, y cuando tenía caídas, se notaban bastante haciendo de la experiencia menos disfrutable.

Si tenemos que destacar que el tamaño de la isla es bastante acorde a una experiencia de mundo abierto más pulida en el sentido de que no hay una sensación de que es monótono o que tomará una eternidad ir de un extremo al otro.

La beta creo que nos ha dejado bien en claro que es The Crew Motorfest. Un juego que busca evolucionar con la formula ya establecida con The Crew 2. Este festival busca ser la celebración de la cultura automovilista con mayores posibilidades de las que nos ofrece Forza Horizon. Hay un sistema de progreso mucho mejor trabajado y la interfaz es más clara con las actividades por el momento para dar una sensación de que las cosas están más organizadas. Es agradable ver que hay una apuesta a modos online más masivos pero no es una experiencia abierta a grandes grupos de amigos.

Esa fue la sensación que nos dio la beta y ya veremos como la experiencia completa cuando el juego salga a la venta en septiembre.